Comentario: Una cosa es hablar de estar llenos del Espíritu, y otra cosa es vivir bajo el control y la dirección del Espíritu. Pablo nos recuerda que debemos de hacer más que "hablar." El Espíritu Santo debe guiar nuestras decisiones, determinar nuestra moralidad y controlar nuestras palabras. Sus frutos: amor, gozo, paz, paciencia, generosidad, bondad, ternura, fidelidad y auto control deben de evidenciarse en nosotros. Pablo dice que los cristianos llenos del Espíritu "viven como si estuvieran llenos del Espíritu".
Oración: Santo Dios, gracias por tu regalo del Espíritu que vive en mí. Que tu Espíritu guíe mis pensamientos y me forme a semejanza de Jesús tanto en palabra como en acción. En el nombre de Jesús oro. Amén